La superación es el valor que motiva a la persona a perfeccionarse a sí misma, en lo humano, espiritual, profesional y económico, venciendo los obstáculos y dificultades que se presenten, desarrollando la capacidad de hacer mayores esfuerzos para lograr cada objetivo que se proponga.
La verdadera superación no tiene cantidad sino calidad.
La superación no llega con el tiempo, el simple deseo o con la automotivación, requiere acciones inmediatas, planeación, esfuerzo y trabajo continuo.
El principal obstáculo de la superación somos nosotros mismos, con nuestros miedos, pesimismos, perezas e inseguridades encubiertas en excusas de todo tipo para no realizar las cosas.
Hay que considerar que siempre existirán los obstáculos pero es parte del reto de la superación afrontarlos y vencerlos. Renunciar a mejorar equivale a una vida triste, gris y con falta de aspiraciones, en una palabra: conformismo.
El principal obstáculo de la superación somos nosotros mismos, con nuestros miedos, pesimismos, perezas e inseguridades encubiertas en excusas de todo tipo para no realizar las cosas.
Hay que considerar que siempre existirán los obstáculos pero es parte del reto de la superación afrontarlos y vencerlos. Renunciar a mejorar equivale a una vida triste, gris y con falta de aspiraciones, en una palabra: conformismo.
¡No te conformes!
¡Nunca renuncies!
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